Si eres dueño de una clínica: financia o muere
- dentalgy
- 23 may
- 6 Min. de lectura

Hace unos días, hablaba con el dueño de una clínica dental que me decía con total seguridad: “Mis pacientes pagan en efectivo, aquí no necesitamos financiación”. Lo decía con convicción, como si fuera un hecho incuestionable.
Le hice una sola pregunta:
"¿Cuántos tratamientos crees que no has cerrado porque el paciente no podía pagarlos de golpe?"
Silencio.
La realidad en el sector dental es clara: los tratamientos suelen ser costosos y la capacidad de pago de los pacientes es limitada. No ofrecer financiación no solo reduce la facturación de una clínica, sino que también afecta a la calidad del servicio. ¿Cuántos pacientes han tenido que optar por soluciones parciales o temporales porque no podían asumir un tratamiento completo? ¿Cuántos han terminado en la competencia porque allí sí les dieron opciones de pago flexibles?
Si no financias, estás dejando dinero sobre la mesa y perdiendo pacientes. Peor aún, les estás obligando a postergar su salud. En un mercado cada vez más competitivo, la financiación no es un lujo ni una opción secundaria: es una herramienta de crecimiento y supervivencia.
El mito de "mis pacientes pagan en efectivo"
Cuando una clínica dice que sus pacientes pagan en efectivo, lo que realmente está diciendo es que no les ha dado otra opción.
La realidad económica de las familias españolas nos dice lo contrario. Según el Banco de España, más del 60% de los hogares no pueden afrontar un gasto inesperado de más de 1.000 euros sin recurrir al crédito. Y en el sector dental, los tratamientos que requieren financiación suelen oscilar entre los 2.000 y 3.500 euros.
Esto significa que, si no ofreces financiación, lo más probable es que tu paciente tenga que renunciar a su tratamiento, retrasarlo o buscar una alternativa más barata y menos efectiva en otro sitio.
Pensemos en otros sectores. La gente financia móviles, ordenadores, coches y hasta vacaciones. ¿Por qué asumir que no financiarían algo tan esencial como su salud dental? El problema no es que los pacientes no quieran financiar, sino que muchas clínicas no les presentan esta opción como parte del proceso habitual.
La financiación como herramienta para cerrar tratamientos
No se trata solo de ayudar a pagar, sino de cerrar más tratamientos y aumentar el ticket medio.
Un paciente que entra en la clínica con la idea de gastar menos de 100 euros en un empaste, puede terminar optando por un tratamiento integral de 3.000 euros si tiene la opción de financiarlo cómodamente en cuotas asumibles. Y lo más importante: accederá a una mejor solución para su problema, en lugar de postergarlo o tomar una decisión basada únicamente en el precio.
Según los datos de las principales entidades financieras, una clínica que implementa un sistema de financiación bien estructurado puede aumentar su facturación entre un 20% y un 30%.
¿Por qué?
Porque cuando el precio deja de ser una barrera, el paciente se enfoca en lo realmente importante: resolver su problema de salud con el mejor tratamiento posible.
Si financias por tu cuenta, hazlo bien: control, legalidad y previsión
Es cierto que algunas clínicas optan por autofinanciar ciertos tratamientos, o más conocido como "pagos según tratamiento" especialmente en casos de ortodoncia, donde los pagos suelen fraccionarse a lo largo de un año o más. En principio, puede parecer una estrategia lógica: permites que los pacientes paguen en plazos sin recurrir a entidades externas, evitas comisiones y mantienes el control.
Pero aquí está la clave: si decides financiar por tu cuenta, necesitas un sistema sólido y estructurado que evite desorden financiero, impagos y problemas legales.
Sin una gestión adecuada, la autofinanciación puede convertirse en un riesgo para la clínica. No se trata solo de cobrar mes a mes, sino de tener control total sobre las cantidades financiadas, prever los flujos de caja y proteger legalmente la deuda.
¿Cómo hacerlo bien? Tres elementos esenciales
Control financiero total
Para evitar que la autofinanciación se convierta en un agujero negro, es fundamental contar con un sistema que registre cada operación, identifique pagos pendientes y permita visualizar los ingresos futuros. Esto no solo facilita la gestión, sino que también ayuda a tomar decisiones estratégicas sobre el negocio.
Previsión de flujos de caja
La clave de cualquier empresa es la liquidez. Si financias tratamientos sin un sistema de control adecuado, puedes encontrarte con meses de ingresos inestables y dificultades para cubrir gastos operativos. Utilizar una herramienta digital que permita prever los flujos de caja te dará estabilidad y seguridad.
Soporte legal: contratos claros y vinculantes
Uno de los mayores errores de las clínicas que autofinancian es no formalizar los acuerdos con los pacientes de manera legal. Sin un contrato bien estructurado, firmado y registrado, la clínica pierde capacidad de reclamo en caso de impago o disputa. Plataformas como la de Dentalgy generan automáticamente contratos personalizados entre la clínica y el paciente, asegurando que cada tratamiento financiado esté respaldado legalmente.
La conclusión es clara: autofinanciar sí, pero con orden y seguridad
Si tu clínica decide ofrecer financiación interna, hazlo con las herramientas adecuadas. Contar con un sistema que te permita controlar pagos, prever ingresos y proteger cada operación con un contrato legal no solo reducirá los riesgos, sino que garantizará la sostenibilidad de tu negocio.
No conviertas la autofinanciación en una carga, conviértela en una estrategia controlada y rentable.
¿Es complicado empezar a financiar?
Aquí es donde muchas clínicas frenan su crecimiento: el miedo a la burocracia y la complejidad.
Lo cierto es que implementar un sistema de financiación en tu clínica es más fácil de lo que crees.
En menos de 15 días puedes tener una solución activa.
No necesitas conocimientos financieros avanzados, solo la formación adecuada para tu equipo.
Existen herramientas digitales que hacen que todo el proceso sea rápido, transparente y sin complicaciones.
El problema no es el proceso en sí, sino la percepción errónea de que será un trámite largo y tedioso. La realidad es que las clínicas que empiezan a financiar se sorprenden de lo sencillo y rápido que es una vez que cuentan con el soporte adecuado.
El peor error: ofrecer financiación solo cuando “parece” necesario
Otro de los grandes fallos que cometen las clínicas es ofrecer financiación solo a los pacientes que creen que no pueden pagar al contado.
Este enfoque es un error por dos razones:
Es un sesgo que perjudica a la clínica. Hay pacientes que podrían pagar al contado, pero prefieren la financiación para mantener su liquidez. Si no se la ofreces, pueden optar por otra clínica que sí lo haga.
No es parte del cierre natural. La financiación no debe plantearse como una solución de emergencia, sino como una opción estándar dentro del presupuesto.
En lugar de decir "El tratamiento cuesta 3.000 euros", di:
"Este tratamiento tiene un coste de 3.000 euros, que puedes pagar al contado o en cómodas cuotas desde 150 euros al mes."
Este simple cambio de enfoque puede hacer una gran diferencia en la tasa de aceptación de los tratamientos.
La objeción más común: “Es que financiar cuesta dinero”
Sí, financiar tiene un coste. Pero la pregunta correcta no es cuánto cuesta financiar, sino cuánto estás dejando de ganar por no hacerlo. Muchas clínicas hacen descuentos del 10-15% para cerrar tratamientos. Lo curioso es que financiar suele costar bastante menos que eso.
Si estás dispuesto a reducir tu margen con descuentos para cerrar un tratamiento, ¿por qué no ofrecer financiación y mantener el valor de tus servicios?
¿Cómo empezar?
Si aún no financias en tu clínica, aquí tienes tres pasos sencillos para empezar:
Busca un partner de financiación sólido, que te ofrezca rapidez, integración y opciones para distintos perfiles de pacientes.
Capacita a tu equipo para que la financiación sea parte natural del proceso de cierre de tratamientos.
Implementa un sistema ágil y digital, que elimine trabas administrativas y haga que financiar sea tan fácil como pagar con tarjeta.
No se trata solo de vender más, sino de ofrecer la mejor solución a tus pacientes. En un mercado donde la competencia es feroz, la diferencia entre crecer o desaparecer puede estar en una sola pregunta:
"¿Cómo te gustaría pagar este tratamiento?"
Empieza a financiar en tu clínica hoy mismo
Si aún no financias en tu clínica, este es el momento de empezar. En Dentalgy, hemos desarrollado una solución de financiación ágil, segura y completamente digital para que puedas integrar este servicio sin complicaciones.
🔹 Aprobaciones rápidas y sin papeleo
🔹 Diferentes opciones de financiación para cada perfil de paciente
🔹 Control total de las operaciones desde un solo sistema
🔹 Contratos automáticos para proteger legalmente cada financiación
🔹 Previsión de flujos de caja para una gestión más eficiente
No se trata solo de vender más, sino de ofrecer la mejor solución a tus pacientes. En un mercado donde la competencia es feroz, la diferencia entre crecer o desaparecer puede estar en una sola pregunta:
"¿Cómo te gustaría pagar este tratamiento?"
Da el paso hoy. Tu clínica y tus pacientes lo agradecerán. Solicita una demo ahora y descubre cómo nuestra plataforma puede transformar tu clínica.
¿Y tú? ¿Ya financias en tu clínica?
Comparte tu experiencia en comentarios y hablemos sobre cómo la financiación puede cambiar tu clínica.